El Ministerio de Relaciones Exteriores ha solicitado la detención preventiva con fines de extradición de Maximiliano Dávila Pérez, exjefe antidrogas del gobierno de Evo Morales. Esta solicitud ha sido confirmada a través de un documento enviado desde la Cancillería al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ). La petición proviene del Tribunal de Distrito de Estados Unidos para el Distrito Sur de Nueva York, según el caso N° S9 19 Cr.91 (DLC).
La solicitud, que al parecer sería la tercera en los últimos dos años, se basa en el Tratado de Extradición entre Bolivia y Estados Unidos, y pide que se tomen las medidas necesarias para proceder con la detención preventiva con fines de extradición.
Maximiliano Dávila, actualmente detenido en el penal de San Pedro en La Paz, está siendo investigado por delitos de tráfico de drogas y delitos relacionados con armas de fuego. Se le acusa de presuntamente enviar drogas desde Bolivia a Estados Unidos cuando era jefe antidrogas. Además, se sospecha que colaboraba con una organización que refinaba cocaína en Bolivia para exportarla a varios destinos, incluyendo Estados Unidos.
En dos ocasiones, Estados Unidos ha solicitado la extradición de Dávila, pero ni el Gobierno ni la Fiscalía han respondido hasta ahora. Al inicio del mandato de Luis Arce, Washington solicitó la extradición de Dávila y ofreció una recompensa de 5 millones de dólares por su captura.
Desde el grupo de los ‘evistas’, Wilfredo Chávez, exprocurador General del Estado, ha expresado su desacuerdo, argumentando que esta solicitud de extradición es un ataque político contra Evo Morales y una sumisión de la soberanía boliviana. «Denunciamos este nuevo ataque político. Si han vinculado a Evo con Dávila, ¿dónde están las pruebas?», comentó Chávez.
Por su parte, Freddy López, diputado del MAS, considera que los ataques contra Evo Morales por sus supuestos vínculos con Dávila son una cortina de humo para distraer al pueblo de la crisis actual del país. «Esto es un ataque frontal, pero nosotros vamos a defender a Evo Morales. No han podido demostrar nada en todo este tiempo», afirmó López.

Desde la oposición, el senador Erik Morón recordó que Dávila fue nombrado jefe antidrogas por Evo Morales, y sugiere que tanto Dávila como Morales deberían ser procesados. «¿Quién nombró a Dávila? Su jefe fue Evo Morales», afirmó Morón, pidiendo que el Tribunal Supremo de Justicia también investigue a Morales por estos delitos. /Mauricio Quiroz/eldeber.com.bo