Puntero en su grupo, Gimnasia y Esgrima de Jujuy vive un presente de ensueño. La ilusión regresó a la provincia de la mano de un equipo que, según las palabras de su lateral izquierdo, Emiliano Endrizzi, se mantiene con los “pies sobre la tierra” a pesar de la euforia.
Sin embargo, en medio de este panorama auspicioso, una premisa se instaló con fuerza en el vestuario: la imperiosa necesidad de seguir sumando puntos.
Endrizzi, el lateral que vuela por la franja izquierda, enfatizó la importancia de mantener el foco en el objetivo principal de cara al compromiso de este fin de semana ante Chacarita y los desafíos de la segunda ronda del torneo. “No nos volvemos locos, estamos con los pies sobre la tierra, porque todavía falta la segunda parte”, afirmó el futbolista, consciente de que el camino hacia el objetivo de máxima es largo y está lleno de obstáculos.
El “Chavo” exteriorizó la felicidad del plantel por haber “devuelto la ilusión a los hinchas”, estado que es palpable en cada rincón del “23 de Agosto”.
Este sentimiento, lejos de generar complacencia, se convierte en un motor para seguir dando el máximo. “La gente que siga soñando y a partir de ese entusiasmo que acompañe a este equipo que da todo dentro y fuera de la cancha”, resaltó Endrizzi, invitando a los hinchas a mantener ese apoyo indispensable.
Por otra parte, dejó en claro que el liderazgo en la tabla no es producto del azar. En este sentido, dijo que “sabemos que venimos haciendo bien las cosas, lo que nos llevó a ser punteros” y sentenció: “En este momento somos el equipo a vencer”.
Esta posición de privilegio, no obstante, conlleva una responsabilidad extra y una mayor atención de los rivales. “El torneo es muy difícil”, definió y en consecuencia la importancia de sumar es un mantra.
Los puntos obtenidos ante Agropecuario y San Telmo son valorados enormemente por el plantel. La paridad del campeonato se refleja en la situación de San Telmo, el equipo que más puntos sumó como visitante en lo que va del certamen, razón por la cual “no es casualidad cómo se dio ese partido”, explicó Endrizzi, dando cuenta de la dificultad que implica cada encuentro.
“En casa queremos sumar de a tres, pero cuando no se puede, un punto es muy bueno”, argumentó, visibilizando una filosofía pragmática que patentiza que el equipo está preparado para adaptarse a las circunstancias de cada partido, priorizando siempre la suma de unidades.
Con la mirada puesta en el próximo compromiso, Endrizzi no dudó en calificar el partido ante Chacarita como “una nueva final”, remarcando que “la humildad y el trabajo” son los pilares sobre los que Gimnasia de Jujuy construye su presente.
El desafío que representa el “Funebrero” en el futuro inmediato del “Lobo”, un grande de la divisional y un equipo que los sigue de cerca en la tabla, agrega un condimento especial al cierre de la primera ronda. “Ellos deben estar preocupados de lo que somos, por eso es clave lo que hacemos nosotros”, consideró y este concepto expone la mentalidad fuerte y la autoconfianza del equipo jujeño, que se sabe protagonista y capaz de seguir marcando el ritmo en el campeonato.
