Este informe se trata del financiamiento de la Planta de Ósmosis Inversa (POI) de Caleta Olivia, una controvertida obra cruzada por la corrupción, las especulaciones políticas, maniobras no del todo clara por estar construida sobre tierras que reclama un privado y las sucesivas postergaciones que tuvo, debido a cuestiones de orden político, mientras la población de esa ciudad padeció por años el desabastecimiento de agua potable, en virtud de las sucesivas roturas del acueducto desde el Lago Munster.
De acuerdo a un análisis realizado exclusivamente sobre los Boletines Oficiales y tal como resulta de la propia información gubernamental, resulta llamativo corroborar cómo tres personas que hoy son candidatos por distintos partidos, movieron un canal de fondos en muy corto tiempo, presuntamente destinados a ese millonario proyecto bajo los argumentos de “terminación y puesta en funcionamiento de la planta de Ósmosis Inversa”.
Como generalmente sucede en Santa Cruz, esta obra que insumió en total (de lo conocido oficialmente) 10 millones de dólares, se hizo todo sin licitación pública.
Un círculo cerrado
En aquel momento (Agosto de 2015) autoridades provinciales, municipales y del Ente Nacional de Obras Hídricas y Saneamiento (ENOHSA) acordaron el inicio de la segunda plata de Ósmosis Inversa, esta vez en Caleta Olivia (la primera fue en Pico Truncado) y en el año 2019 Alicia Kirchner arremetió con la finalización del proyecto que venía demorado, mediante la aprobación de inversiones del Fondo Fiduciario Unirse.
En el año 2020 se puso en marcha la planta que produce 12.000 m3 de agua apta para el consumo humano, capta 1.280 m3 por hora de agua de mar, opera 24 horas con 132 Kilovatios del Interconectado nacional y emplea a 18 personas dependientes de Servicios Públicos Sociedad del Estado.
Las personas que tuvieron manejo directo de la obra y constituyeron el carrier de los fondos públicos son tres: Pablo Grasso, en ese momento titular del IDUV, hoy intendente de Río Gallegos y candidato a Gobernador por el oficialismo; Facundo Prades, ex intendente de Caleta Olivia, hoy candidato a Diputados por el Pueblo de Caleta Olivia por el SER y Fernando Cotillo, ex intendente de Caleta Olivia, actual intendente de esa ciudad y candidato a Vicegobernador en fórmula con Javier Belloni, por parte del oficialismo provincial.
La postergación de la obra, como sucede comúnmente en esta provincia, no solo trajo aparejado el retraso de una solución final al problema hídrico/sanitario que tenía Caleta Olivia, sino constantes “redeterminaciones de precios”, que por sumas millonarias en dólares, fueron sumándose y manejadas por quienes hoy son ex funcionarios, funcionarios y candidatos a los mismos cargos o a la gobernación de Santa Cruz.
Muchos años, mucha plata
Solo en esta obra de la Planta de Ósmosis Inversa entre los intendentes Facundo Prades y Fernando Cotillo, tomando el valor oficial del Banco Central de la argentina BCRA y de acuerdo a las fechas indicadas en los Boletines Oficiales que lo reflejan, la inversión asciende a $ 698.438.548,84, monto que convertidos a dólares de esos años corresponden a US$ 9.959.618,79.
En lo pasos finales antes de la puesta en marcha de la planta, el intendente Facundo Prades, a pocos días de entregarle el mandato al intendente electo Fernando Cotillo (2019) celebró un acuerdo con el presidente del IDUV, por entonces Pablo Grasso.
Este acuerdo, en virtud de lo expresado por el B.O Nº 314 en su página 3 de fecha 19 de junio 2020, se asignó para la terminación de la Planta de Ósmosis Inversa de Caleta Olivia, a través del Fondo UNIRSE (Decreto provincial 1188/16) y aprobada por resolución N° 018/19 del Comité Administrador del Fondo Fiduciario por un monto de $ 289.751.427,16, un equivalente en Dólares de ese momento a US$ 4.621.750,87.
En el mismo Boletín Oficial N° 314 del 19 de junio 2020, en página N° 3 consta que a pedido del flamante Intendente Fernando Cotillo, se remite de parte del IDUV el monto de $ 50.344.595,30, lo cual incrementa el monto de la obra en más de 50 millones “…por redeterminación de precios y existiendo acuerdo entre los organismos firmantes, se amplía el monto de financiamiento para la ejecución de la obra citada en función de las disponibilidades presupuestarias existentes” expresa el documento de asignación de fondos remarcado en el B.O.
Cotillo, entonces, emitió una Decreto municipal donde ratificó “en todos sus términos la Addenda de Ampliación de Monto de Financiamiento Obra: “Terminación y puesta en funcionamiento de la obra planta de osmosis inversa en la localidad de Caleta Olivia” suscripto entre la Municipalidad de Caleta Olivia y el Instituto de desarrollo y Vivienda de la provincia de Santa Cruz, lo cual fue refrendado por el Secretario de gobierno Pablo Calicate y el secretario de hacienda CPN Pablo Martín Guerrero.
El 21 de agosto 2020, en la página 4 del Boletín Oficial Nº 318, aparece otro decreto municipal (Nº 275/20) del 4 de agosto 2020, con la firma de Fernando Cotillo, se vuelve a firmar otra adenda de “Ampliación para la terminación y puesta en funcionamiento de la Planta de Ósmosis Inversa” por la suma de $ 340.096.022,46, que fue protocolizada entre el jefe comunal de Caleta y el Instituto de Desarrollo Urbano y Vivienda con la presidencia del Arq. Roberto Andrino, dado que Pablo Grasso se había hecho cargo de la Municipalidad de Río Gallegos.
E inmediatamente el intendente Cotillo pide $ 18.246.503,92 más, por “redeterminación de precios”, con el mismo argumento “Terminación y puesta en funcionamiento de la obra planta de osmosis inversa en la localidad de Caleta Olivia”.
Haciendo una visualización de la documentación oficial, es notable ver que en la primera “Terminación de la obra”, durante la intendencia de Facundo Prades no existe ningún Boletín Oficial cuya fecha coincida con las fechas invocadas por el intendente Cotillo.
En ninguno de los tres BO en la intendencia de Prades, se menciona la POI ni tampoco se lee allí llamados a licitación pública para la terminación de obra. La única licitación que se observa, es el llamado para el tendido de líneas de media y alta tensión donde fue conectada la planta desalinizadora y de la misma manera cabe decir que no hubo ningún acto oficial de inauguración, como es tan común en los gobiernos provinciales.
Corto tiempo, muchos fondos
De esta manera contabilizamos que Facundo Prades recibió el 25 de noviembre 2019, quince días antes de entregar el municipio a Cotillo, $ 289.751.427,16, con un dólar a $ 62,693 hace un total de US$ 4.621.750,87.
El 19 de junio 2020, la municipalidad de Caleta Olivia recibe $ 50.344.595,30, con un dólar a U$S 73,067, arroja un total de U$S 689.019,60
El 4 de agosto 2020, la municipalidad de Caleta Olivia a través de su intendente Fernando Cotillo amplía el monto de obra en $ 340.096.022,46 con un dólar a $ 77,082 llega a un monto en moneda estadounidense de US$ 4.412.132,82.
Y en esta misma fecha del 4 de agosto 2020 (en el mismo BO Nº 318), Cotillo pide otra re determinación de precio por $ 18.246.503,92, que al tipo de cambio $ 77,082 arroja un total en dólares de U$S 236.715,50.
Es de esta manera y con esta sucesión de fondos girados desde el IDUV al municipio de Caleta Olivia, que la obra para la terminación y puesta en marcha de la Planta de Ósmosis Inversa, le significó al país una erogación de $ 698.438.548,34, lo cual totaliza la cantidad de U$S 9.959.618,79. (Agencia OPI Santa Cruz)