En un día cargado de entusiasmo y compromiso colectivo, La Quiaca se posiciona como un bastión cultural de Jujuy y de toda la región andina.
En el despacho del intendente Dante Velázquez, se celebró una reunión clave para avanzar en el anteproyecto técnico que busca declarar a la Manka Fiesta como Patrimonio de la Humanidad ante la UNESCO. Este esfuerzo es un testimonio del poder de la participación comunitaria y la visión compartida, destinada a rescatar y proyectar al mundo una tradición que enraíza la identidad quiaqueña en siglos de historia.
Un proyecto liderado por la visión y el compromiso
El intendente Dante Velázquez, con su profunda convicción de integrar a la comunidad como el centro del desarrollo cultural, encabeza esta ambiciosa iniciativa que busca proyectar a La Quiaca en el escenario global. Velázquez destacó el valor histórico y simbólico de la Manka Fiesta, un evento que, desde tiempos precoloniales, fungió como el primer mercado de integración regional en el altiplano, con un radio de influencia de más de 1000 kilómetros. “Este proyecto no solo busca preservar nuestras raíces, sino también construir el futuro de La Quiaca como el corazón de la patria grande”, señaló el intendente.
La conducción técnica está en manos del Lic. Dante Dodi, director de Cultura y Turismo de La Quiaca, quien coordina los esfuerzos para la elaboración de un dossier robusto que será presentado ante la UNESCO en marzo de 2025. Este documento, que integra aportes de académicos, artistas y familias quiaqueñas, busca demostrar la riqueza cultural y la relevancia histórica de la Manka Fiesta.
Embajadores culturales y un trabajo colectivo ejemplar
La participación de los embajadores culturales Quique Teruel y Pata Iraola ha sido fundamental para darle visibilidad al proyecto en el ámbito nacional e internacional. Con su experiencia y compromiso con la cultura jujeña, han fortalecido el marco institucional y legislativo necesario para avanzar con el reconocimiento de la Manka Fiesta.
El Lic. Fidel Tolaba, reconocido por su sensibilidad literaria y su profundo conocimiento histórico, lidera la documentación narrativa del proyecto, con la elaboración de un libro dedicado a la historia y significancia de la Manka Fiesta. Este material, enriquecido por relatos de familias quiaqueñas y registros fotográficos únicos, busca capturar la esencia de una tradición que sigue viva en el corazón de la comunidad.
Asimismo, decenas de familias locales han ofrecido objetos, imágenes y testimonios que serán clave para fundamentar la solicitud ante la UNESCO. Velázquez agradeció especialmente la generosidad de vecinos como Pancho Maigua y la familia Valle, quienes han compartido valiosos registros históricos. “Este proyecto no es de una sola persona, es de todos los quiaqueños. Cada contribución nos acerca más a nuestro sueño de ver a La Quiaca en el mapa cultural del mundo”, expresó el intendente.
La Manka Fiesta: un símbolo de integración y orgullo.
La Manka Fiesta no es solo una celebración; es un testimonio vivo de integración regional. En este mercado precolonial, comunidades del altiplano se reunían para intercambiar alimentos, enseres, piedras preciosas y sal, creando un sistema de trueque que no solo satisfacía necesidades materiales, sino que también fortalecía lazos culturales y sociales.
Hoy, esta tradición tiene el potencial de conectar a La Quiaca con el nuevo contexto global, donde el ingreso de Bolivia a los BRICS y el acuerdo Mercosur-Unión Europea refuerzan la importancia de la integración regional. La declaración de la Manka Fiesta como Patrimonio de la Humanidad sería un reconocimiento a la riqueza histórica y cultural de La Quiaca, así como una herramienta para atraer turismo y oportunidades económicas a la región.
5 Razones para apoyar este reconocimiento:
Patrimonio histórico único: La Manka Fiesta es uno de los sistemas de trueque más antiguos del altiplano, con raíces que trascienden los periodos precolonial, colonial y republicano.
Proyección internacional: Su reconocimiento como Patrimonio de la Humanidad posicionaría a La Quiaca como un destino cultural de renombre global.
Participación comunitaria: El proyecto es un ejemplo de cómo la colaboración entre vecinos, académicos y autoridades puede preservar tradiciones y construir futuro.
Impulso al turismo: La declaración atraería visitantes de todo el mundo, generando un impacto positivo en la economía local.
Rescate de la identidad: Este esfuerzo asegura que las futuras generaciones mantengan viva una tradición que es parte fundamental de su identidad.
Un camino lleno de esperanza
La fecha límite para presentar el dossier ante la UNESCO es marzo de 2025, y el camino aún requiere de esfuerzo colectivo y compromiso. Las reuniones con vecinos, el trabajo técnico liderado por expertos y la promoción cultural en todos los niveles institucionales son parte de un proceso que refleja el amor de La Quiaca por su historia y su deseo de compartirla con el mundo.
La Manka Fiesta es el corazón cultural de La Quiaca y un símbolo de integración que conecta el pasado con el futuro. Bajo la visión del intendente Dante Velázquez y el esfuerzo colectivo de toda la comunidad, este proyecto no solo busca un reconocimiento formal, sino también un lugar en la memoria global como un emblema de unidad, riqueza cultural y esperanza para las generaciones futuras./Todo Noticias La Quiaca