Están imputados por el delito de siembra y cultivo de estupefacientes agravado por el número de intervinientes, en calidad de coautores.
A partir de las 8 de mañana, el Tribunal Oral Federal N°1 -con la presidencia de la jueza Marta Liliana Snopek- llevará adelante el juicio seguido contra Sergio Humberto Salum, Víctor Nicolás Farfán y Jonatan Emanuel Garzón por el delito de siembra y cultivo de estupefacientes agravado por el número de intervinientes, en calidad de coautores.
En el caso de Garzón, el delito concurre con el de almacenamiento, pues en un allanamiento realizado en su vivienda, en la localidad jujeña de Monterrico, se incautó una cantidad de poco más de tres kilos de marihuana.
En representación del Ministerio Público Fiscal y de la PROCUNAR NOA, intervendrá el fiscal general Eduardo José Villalba, quien esta mañana formalizó el pedido de condena de otros tres de los acusados, instancia alcanzada a través de un acuerdo de juicio abreviado.
Se trata de los imputados Juan Berruezo, Luis Aparicio y César Royo, cuyas condenas se suman a las dispuestas por la misma vía el 6 de octubre del año pasado, durante la audiencia de control de acusación, celebrada ante el juez Alejandro Augusto Castellanos.
En dicha ocasión, resultaron condenados los hermanos Tomás y Simón Aparicio, hijos de Luis; Rodrigo Martín Guillermo Coronel y José María y Gustavo Segovia, también hermanos. Los cuatro primeros recibieron penas de 3 años de prisión, mientras que la aplicada al último fue de un año menos, todos por el delito principal, pero en calidad de partícipes secundarios.
En la audiencia de hoy, en tanto, la jueza Snopek admitió el acuerdo presentado por el fiscal Villalba y condenó a Berruezo y Aparicio a las penas de 8 y 6 años de prisión efectiva, en ambos casos en calidad de coautores del delito principal.
Asimismo, se dispuso la condena de Royo a 3 años de prisión condicional, pero en grado de partícipe secundario. En este caso, y dado que el acusado no pudo asumir el pago de la multad impuesta, acordó con la fiscalía tareas comunitarias en una escuela de la localidad jujeña de Palpalá por el tiempo de la pena.
Respecto al pedido de decomiso de la finca, y tal como lo acordó la fiscalía, la jueza dispuso el embargo de la propiedad hasta su venta, instancia en que el Estado Nacional percibirá una suma de 10 millones de pesos, correspondiente al 10 % del inmueble, perteneciente a Berruezo.
De esta manera, y a un año del allanamiento que desbarató la mayor plantación de marihuana del país, con una producción de más de 1.300.000 dosis, la fiscalía llega a juicio con los principales responsables en el banquillo de los acusados.
En La Caldera
La investigación que condujo al allanamiento principal en la finca de Berruezo, en La Caldera, se gestó en julio del 2021 a partir de la denuncia de un ganadero, que reconoció la plantación al recorrer los límites de la propiedad ubicada en el límite de la provincia de Salta con Jujuy.
Posteriormente, y bajo la supervisión de los auxiliares fiscales Mariana Gamba Cremaschi y Jorge Viltes Monier, de la PROCUNAR NOA, se llevaron adelante tareas de campo e inteligencia que llevaron al fiscal Villalba a solicitar la orden de allanamiento, tanto para la finca como otros domicilios en Jujuy.
Fue así como el 4 de febrero, al cumplimentarse tal medida, se descubrió un sembradío con más de 2400 plantas de marihuana, ya con una altura de casi dos metros, en un sector de la fina, más cercano a la ladera de los cerros que rodean la zona, cuya vegetación servían de camuflaje para el cultivo ilícito.
La magnitud de esta plantación, con una extensión de una cuadra, no fue lo único que sorprendió al personal de Escuadrón 53 de Gendarmería Nacional y del Grupo Operativo Conjunto NOA, quienes hallaron en el lugar, otro sector perfectamente acondicionado, donde se encontraron 7.200 plantines ya listos para su cultivo.
También se hallaron otros 1.008 ejemplares en germinación, 305 gramos de semillas, 71 kilos de cogollo en una especie de secadero y tres ladrillos de marihuana ya prensados, evidencias claras del montaje que los acusados habían logrado desplegar desde larga data.
El panorama se completó con el hallazgo de herramientas propias del cultivo, tachos con insecticidas y fertilizantes, mochilas de fumigado, prensadora y picadora, un grupo electrógeno, extensiones eléctricas y garrafas de calor que eran usadas para las noches de frío.
En base a todos estos elementos, la fiscalía, al formalizar la imputación inicial contra Berruezo y Garzón, el 7 de febrero del 2022, sostuvo que los acusados tenían todo para el procesamiento y fraccionamiento de la droga, por lo que no descartó la participación criminal de otras personas. En los meses siguientes, hasta el 30 de mayo de dicho año, el número de acusados ascendió a once, todos ellos residentes en localidades jujeñas. /El Tribuno Salta
