Se realizó esta mañana en La Esperanza, una marcha integrada por familiares, amigos y personas solidarias, reclamando Justicia, por la muerte del joven Cristian Castaño, empleado de la Municipalidad de La Esperanza, quien falleció electrocutado, el pasado 10 de enero mientras realizaba trabajos de mantenimiento en un poste del alumbrado público en la Avenida del Trabajo, de esa localidad.
Luego de agruparse en el lugar de partida, hicieron un recorrido prefijado, que incluía el Concejo Deliberante y el edificio municipal. Lamentablemente, ni el Presidente del Deliberante concejal Diego Tapia ni el intendente Ramón Carrizo se encontraban en el lugar de trabajo de cada uno de ellos.
En la parte externa del edificio municipal, se encontraba un reducido número de efectivos policiales, no permitiendo de ninguno de los familiares y/o vecinos, el ingreso a “la casa del pueblo esperanceño”.
Los marchistas mostraban varios carteles pidiendo justicia por Cristian.
Un familiar de Cristian, que participó de la caminata, en diálogo con FM La Roca 100.9, realizó serias denuncias, reiterando que el fallecido “no tenía ninguna protección para realizar el trabajo” y que “el compromiso de que entre a trabajar la hermana (de Cristian) al municipio, tampoco se cumplió”.
También denunció que “el intendente (Carrizo) dijo por radio que el tema sepelio, ellos (el municipio) iban a pagar, tampoco se cumplió”
Lamentó “que ninguno de sus compañeros fueron a ver a la familia, a contar, porqué, él, tenía que estar arriba”.
Afirmó “ que en ese momento, no tenía ninguna protección y no estaba capacitado (para hacer ese tipo de trabajo), no hizo ningún curso, no sé porqué lo enviaron ahí”
Señaló como responsables, al enviarlo a Cristian, sin elementos de seguridad ni capacitado “al encargado y al intendente (Carrizo).
Con respecto al gasto del sepelio, dijo “nos llamó diciéndonos que nosotros tenemos pagar (el sepelio) y que se lo iban a descontar a él, pretender que nosotros paguemos, es algo injusto”
Desde el fatídico día, dijo, “nadie fue a hablar con nosotros. El intendente (Carrizo) fue do o tres veces a hablar con el abuelo (de Cristian), para arreglar no sé qué”
Sobre los gremios, dijo “ahora recién apareció UPCN” y que después de dos o tres días, “recién le compraron los elementos que tenían que haber tenido.”
O sea, pasó este hecho desgraciado, para que recién el intendente compre, la botas, ropas y otros elementos de seguridad.
Otra grave denuncia, fue la de mostrar un certificado, que Cristian, no tenía ART, y “encima con el horario, le querían poner, que él (Cristian) trabajaba a la tarde, cuando él tiene los papeles firmados que trabaja a la mañana, querían tergiversar, que el trabajaba a la tarde, sin embargo, tiene el papel firmado que el trabaja a la mañana”
“Pasamos humillaciones con el Intendente, fue , quiso arreglar, no sé, pero nunca jamás pidió perdón. Nunca dijo, yo no le compré las botas, perdón. Igual que los testigos, nadie fue a la casa, a decir, yo estaba ahí, y contar lo que pasó”
Afirmó que fue ningún concejal a verlos, “anoche recibí una llamada, querían dar plata, no sé para qué, nosotros no queremos plata, nosotros queremos justicia”
En el lugar también, se encontraba el abuelo de Cristian, quien confirmó que el intendente Carrizo fue a su casa, en Lote Miraflores, “para ofrecer un trabajo, para la hermana de Cristian, y yo (el abuelo) le dije, porqué vos, antes de venir a mi casa, porqué no vas a verlo al abogado primero, tenés que ir a arreglar allá y recién venir a mi casa”
El abuelo, Sr Castaño, dio a entender que el intendente Carrizo, no quiere que la familia accione judicialmente, a cambio de dar un puesto de trabajo a su nieta, hermana de Cristian.
El tío de Cristian, también afirmó que fueron a ver al jefe de personal municipal, en su momento, luego de la primer promesa laboral a favor de su hermana, y que le manifestó “el lunes que venga” y fue otra mentira.
Prometieron hacer otra marcha más intensa, si el Intendente no cumple lo comprometido. /Fotos ABC Noticias



